viernes, 13 de noviembre de 2009

Mandarin Eater

En el dia de ayer (o anteayer, sigo de baja, mi nocion del tiempo esta destrozada) he hecho algo muy malo malisimo, dañando hasta el exceso la imagen de toda una generacion gracias a mi terrible conducta.

Y es que me dio un antojo y me compre un kilo y medio de mandarinas y me fui a comermelas al parque para hacer tiempo hasta que terroncito saliera de currar.

La gente me miraba francamente mal, ahi andaba yo con una malla de citricos a los pies, y los antebrazos sobre las rodillas, sentado en un banco, pelandolas (las mandarinas, digo), y las viejunas que paseaban a sus perros pensando: "Otra generacion perdida", nada de litronas... no... mandarinas.

Menos mal que con tanto jugillo, me entraron unas terribles ganas de mear que desate sobre paredes, farolas, arboles y arbustos como un buen hooligan, redimiendome en parte de mi condicion de bicho raro.

Buen fin de semana!!... este sabado teneis que ser el orgullo de toda vuestra generacion, asi que ir pensando algo fuerte que hacer.

2 comentarios:

Clark Kent dijo...

Jaja! Mandarinas... Otra generacion al carajo. Un kilo y medio cuantas mandarinas son. Eso ya es vicio.

Lantia dijo...

Joé... este finde me compré pa llevarme al barco y ahí que me senté por la tarde y agarré la bolsa y no pude parar ¿qué pasa? ¿no podemos los jóvenes ser trangresores de cuando en cuando y romper las normas? Seguimos siendo marginados e incomprendidos :-P