jueves, 1 de marzo de 2007

Autoridad oleica

Vaya dos encuentros divertidos que tuve ayer... el primero con la autoridad, cuando al bajar de mi casa cargado como una bestia parda al coche que aparque escasos dos minutos antes en doble fila, me encuentro al municipal de turno escribiendo en su libreta...

Como ya os dije, ayer llegaba mi señora a Madrid, y ya sabeis que las mujeres son como los gases (nobles o no, dependiendo de la mujer en particular), es decir... ocupan todo el volumen disponible independientemente de la cantidad de gas existente.


Eso significa que si trajo una maleta del tamaño de estocolmo, esta venia llena hasta los mismisimos cojones, y ahi ibamos los dos... yo con las suyas y buscando una carretilla elevadora que me ayudase a llevarla, y ella con mi bolsa, que es de deporte, va medio vacia, y por no llevar (me di cuenta esta mañana), no lleva ni camisas.

De semejante guisa, y si le añadis la "compra" que hice en la nevera de mi madre (esos truquitos de soltero), saliamos del portal, a escasos 3 metros del coche.

El tio (madero), estaba empeñado en que habia montado un pollo de tres pares de huevos en la calle, y que si no pasaba el autobus, y que si "mire, mire usted para atras y mire la que ha liado", detras mio habia DOS COCHES, pero bueno... al final la razon triunfo sobre la "justicia" (frase lamentablemente con demasiado sentido) y la autoridad consideró que parar durante menos de dos minutos en doble fila, con las emergencias puestas, para bajar 750 kilos de equipaje y viveres (mas 5 o 6 kilos mios) cargar, y marcharme, no era merecedor de 60 eurazos de multa que me habrian caido.

No es que yo sea una persona muy convincente, la verdad, pero creo que estuve acertado en mi argumentacion tipo: me arrastro ante ti para demostrar tu absoluta autoridad; que mi verguenza y arrepentimiento sirva como multa y mi bolsillo quede impune.

Se que es una conducta ARRASTRADA, pero hay que decir lo que hay que decir en cada caso, y este no es el momento de ponerse farruco.

El segundo encuentro fue fortuito, inevitable y aqui no habia palabras que decir que evitaran algo... un monton de aceite hirviendo en el que estaba haciendo unos filetillos de pollo se vino hacia mi cuerpo, y me ha dejado el cuello como el de un aleman en agosto... he dormido mal, me duele y tengo a todo el mundo diciendo: "joder con tu novia... como se las gasta".

Ojala con el aceite tuviera la opcion de pagar los 60 leuros y asi poder evitar discutir con el.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Joder qué duro lo del aceite. Y esos comentarios de "joder con tu novia...". Mátalos. Mátalos a todos. Yo los odiaría, me reiría en plan "jaja, sí", pero desearía su muerte. Luego me arrepentiría de su muerte, pero de eso ya se preocupa uno luego.
Respecto al poli, you did great, yo hace cosa de un mes me topé con uno en Chamartín: "enséñeme su DNI"... así de buenas a primeras, pregunté por qué de buenas maneras... el tipo me miró de arriba abajo, soltó una medio risa sarcástica y dijo: "porque soy policía"... Y a partir de ahí, un rosario de gilipolleces de chulito con placa. Lamentable. La opción correcta es darles palmaditas en la espalda, desde luego. Si no los que se ponen farrucos son ellos... y como legalmente pueden hacerlo... Aunque no sea justo...
-CK

Anónimo dijo...

Si yo fuera policia, y te viera por la calle degustando un gofre sin chocolate, o cualquier tipo de bollo con chocolate NO negro... te hacia algo mas que pedirte el DNI, TERRORISTA!

marta en parís dijo...

Con la autoridad no se juega nenes. Yo me puse borde con uno porque estaba ligando conmigo (eso creo). La cosa fue así:
Aeropuerto de barajas.
De la nada aparece un poli y se planta en medio de la carretera.
Me hace señales de que me pare.
Poli: buenas tardes señorita. No me ha visto en medio de la vía? Casi me atropella. Carné de conducir.
Yo: Pero es que ha saltado a la carretera, normal que casi le atropelle. (primer error)
Poli: Carné de conducir.
Lo mira y me dice: Así que usted es una brujita con muy mal humor no? (lo juro)
Yo: Perdona (ya ni usted ni pollas)
Nota: tenía una pegatina de una bruja con una frase que decía "Perdoname por mi mal humor" pegada en el carné. (segundo error, nunca pegues cosas en un documento oficial ni lleves papel de fumar ni cosas de este estilo)
Poli: No quería ofenderla señorita.
Pero me está usted faltando al respeto y tengo que pedirle la documentación del coche.
Le doy las instrucciones del coche. (por equivocación)
Al final me dejó irme, pero la siguiente vez fui encantadora y no me pidieron de nada.